Francia ratifica su don de favorito superando a Uruguay
Francia ha derrotado a Uruguay este viernes en el Estadio de Nizhni Nóvgorod, logrando el boleto a la semifinal del Mundial de Rusia 2018. El duelo fue saldado con un marcador de 2 a 0 en un partido marcado por un error garrafal del portero uruguayo. | Foto Reuters
Confirmando su condición del más favorito entre los favoritos, la selección de Francia derrotó hoy el seleccionado de Uruguay por dos tantos contra cero. El partido para cuartos de final jugado en el estadio de Nizhny Novgorod, acabó con el sueño uruguayo de pasar a la semifinal.
Francia volvió a mostrar su efectividad frente al arco, tal como se había visto cuando eliminó a Argentina. Se convirtió en el primer semifinalista del Mundial de Rusia con un partido serio y práctico en el que no necesitó ninguna exhibición de sus estrellas. El ya famoso plantel mutiétnico europeo jugará la seminifal el próximo martes, en el último paso a la gran final, contra la selección ganadora del partido que disputarán esta tarde Brasil y Bélgica.
Uruguay fue castigada por una acción mal defendida a balón parado, aprovechada de manera magistral por Varane, y un error de su portero, Muslera, cuando buscaba la remontada a base de orgullo y juego directo. No necesitó más el cuadro francés, que viviendo sus mejores momentos de juego después del segundo gol a cargo del delantero francés Antoine Griezman.
Griezman, que anotó el segundo gol que garantizó el pase francés, fue elegido el mejor jugador del partido. El futbolista del Atlético Madrid disparó sin aparente peligro desde fuera del área pero Muslera hizo un fallo garrafal y no pudo blocar el balón, lo que propició que el esférico se introdujera dentro de su marco. Este tanto fue un mazazo del que ya no se recuperó el combinado de Tabárez.
Ese 2-0 fue terriblemente lapidario para Uruguay, que se marcha del torneo dejando a Brasil como única selección no europea en competición, hasta después de las 14:00, hora boliviana, cuando el equipo de Neymar deberá enfrentarse a la temida maquinaria belga.
