Data: marzo 27, 2014 | 21:01
DERECHO INDÍGENA | Sus líderes han informado que están viviendo vidas mucho más sanas desde que regresaron a su tierra, pero los pistoleros de los ganaderos y soyeros siguen amenazándolos...

Una comunidad guaraní vence el despojo y retorna a su territorio ancestral en el Brasil

Los guaraníes de la comunidad Pyelito Kuê, que cuentan con una importante población infantil, han regresado a parte de sus territorios ancestrales tras presionar a un ganadero a marcharse. | Foto Survival

Los guaraníes de la comunidad Pyelito Kuê, que cuentan con una importante población infantil, han regresado a parte de sus territorios ancestrales tras presionar a un ganadero a marcharse. | Foto ©Survival

Guaranies

Los guaraníes vivían previamente atrapados en una “isla” entre un río y un “mar” de soya. | Foto ©Survival

© Survival

Una comunidad guaraní en Brasil ha logrado regresar a una pequeña parcela de su territorio ancestral y el ganadero que había usurpado su tierra y bloqueado el acceso a sus hogares se ha visto obligado a marcharse.

Cerca de 200 de guaraníes viven actualmente en esta zona de su territorio por primera vez desde que les fuera despojado para dar paso a vastas plantaciones de soya. Los indígenas fueron excluidos en reservas masificadas bajo

 condiciones paupérrimas y, posteriormente, en un diminuto terreno, atrapados entre el río y un “mar” de soya. Los periodistas han descrito su situación como un “genocidio silencioso”.

Los guaraníes del Mato Grosso do Sul

Los guaraníes fueron uno de los primeros pueblos contactados tras la llegada de los europeos a Sudamérica hace unos 500 años.
La tierra de los guaraníes fue ocupada por los ganaderos en la década de 1970, lo que obligó a los indígenas a vivir en reservas masificadas en condiciones deplorables.
El pueblo guaraníes de Brasil se divide en tres grupos: los kaiowá, los ñandeva y los m’bya. El mayor de ellos es el de los kaiowá, que significa “pueblo del bosque”.
Niños guaraníes trabajan en campos de caña de azúcar que ahora cubren gran parte de las tierras ancestrales de su pueblo en el estado de Mato Grosso do Sul.
Se trata de un pueblo profundamente espiritual.
La mayor parte de las comunidades cuentan con una casa de oración y un líder espiritual, cuya autoridad se basa más en el prestigio que en el poder formal.
A lo largo de los últimos 500 años, prácticamente la totalidad de las tierras guaraníes les han sido arrebatadas.

La fiesta del retorno de la muerte

Un hombre guaraní de Pyelito Kuê dijo a Survival: “Estamos muy felices. Hemos luchado por nuestra tierra porque es nuestra. Mi abuelo fue enterrado aquí. Hemos sido amenazados por los ganaderos pero no vamos a renunciar; nos mantendremos firmes porque necesitamos esta tierra”.

A comienzos del año pasado, los guaraníes celebraron el momento decisivo en que el Gobierno reconoció su territorio como tierra guaraní, y dio un paso adelante en su protección como territorio indígena.

Los guaraníes de la comunidad Pyelito Kuê han regresado a parte de sus territorios ancestrales tras presionar a un ganadero a marcharse.

Los guaraníes han informado que están viviendo vidas mucho más sanas desde que regresaron a su tierra, pero los pistoleros de los ganaderos siguen amenazándolos y disparando en dirección a su comunidad. Los indígenas han sido víctimas de una serie de ataques brutales en los años recientes.

Brasil está legalmente obligada a demarcar el territorio guaraní, pero graves retrasos en este proceso han obligado a los indígenas a soportar desnutrición, alcoholismo, violencia, asesinatos y la más alta tasa de suicidios del mundo.

Los indígenas y Survival hacen un llamamiento a que el territorio Pyelito Kuê sea completamente demarcado para el uso exclusivo de la comunidad.

Survival ha lanzado una nueva campaña, “El lado oscuro de Brasil”, para destacar el reclamo de los guaraníes y otras tribus amenazadas en la antesala del Mundial de Fútbol de la FIFA 2014.

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